Lo primero como es obvio es elegir nuestro cuerpo de cámara. Para ello primero analizaremos cuales son las características principales de este tipo de evento.
La seguridad de nuestras fotografías es lo más importante, ya que nadie quiere verse en una situación donde nuestra tarjeta sd falle después de una sesión como una boda. Por ello necesitamos un cuerpo de cámara que pueda incorporar dos ranuras de tarjeta para realizar copias de seguridad o si lo deseamos tener dos cuerpos diferentes, aunque seguimos pudiendo perder varias fotografías por el camino.
Pasando a la parte técnica de la fotografía de boda, los fotógrafos suelen tener que moverse entre interior y exterior con lo cual nos implica tener una cámara que se adapte bien a los cambios de luz y que no tenga demasiado ruido. Teniendo este factor en cuenta normalmente utilizaremos una cámara Full frame, pero si esto no es posible también podemos utilizar una cámara de formato Aps-c teniendo en cuenta sus limitaciones a la hora de sacar fotos en interior.
El enfoque es un punto crucial debido a que no conocemos cuál será el final de la escena que estamos tratando y debemos anticiparnos a ella. Por ello necesitamos una cámara que tenga un enfoque rápido para que nuestras fotos siempre salgan enfocadas sobre todo en los rostros de los participantes.
Otro punto a tener en cuenta es el tamaño del equipo ya que en las bodas solemos estar muchas horas con el equipo a la espalda. Por ello muchos de los fotógrafos últimamente se están cambiando a cámaras evil o mirrorless reduciendo mucho el peso de los equipos sin limitar la calidad.
Otra de las características importantes que normalmente nos piden en las bodas es que podamos realizar pequeños clips de vídeo para que se queden guardados. En estos casos también es importante que nuestra cámara sea capaz de grabar vídeo a buena calidad, siendo 4K la calidad estándar en este momento.
Teniendo esto en cuenta te voy a recomendar tres cámaras de diferente gama de precios que te ayudarán en tu próxima boda.